El encargo más difícil del mundo

–¿Ese sí que lo voy a poder leer, papá? –me dijo mi hija, señalando las galeradas de La Leyenda del ladrón, con los dedos llenos de polvo de gusanitos. Era febrero de 2012, hace justo cinco años, y yo bastante trabajo tenía intentando acentuar correctamente los pronombres demostrativos, que siempre me han dado problemas, como … Sigue leyendo El encargo más difícil del mundo