Inicio > Poesía > 5 poemas de Carlos Palacio (Pala)

5 poemas de Carlos Palacio (Pala)

5 poemas de Carlos Palacio (Pala)

Carlos Palacio (Pala) es filólogo hispanista, médico y cantautor. Nueve álbumes musicales de estudio y cinco poemarios dan cuenta de su dedicación, por más de veinte años, al cultivo de la palabra escrita y cantada.

Ha recibido, entre otros reconocimientos, el Premio Nacional de Música del Ministerio de Cultura de Colombia, el Premio Internacional de Poesía Miguel Hernández, el Premio de Poesía Alcaldía de Medellín, la Orden al Mérito Artístico Don Juan del Corral del Concejo de Medellín y, con este poemario, el Premio Internacional de Poesía «Antonio Machado en Baeza».

Zenda adelanta cinco poemas de En el abrazo de la sílaba (Hiperión).

***

Ayudarme a vivir

Hay una forma de salvarse
que significa no salvarse nunca.

Un modo incandescente de enfrentarse a la lava.
Un método de escape
que implica atar los pies a la cornisa.

Se trata de inclinarse frente al árbol
mientras el hacha quiebra.
Se trata de acudir al terremoto
descalzo y con los ojos entreabiertos.

A veces la certeza de lo bello
no te la da la flor sino la esquirla.

***

Los trillos de la entrega

Hace tiempo, lo acepto,
voy a las despedidas como a los cumpleaños:
curioso ante la inercia de la lágrima y entregado a la pólvora.

Ya pasaron los días en que importaba el signo de los cuerpos
o la constatación de los regresos.
Hoy es, más bien, el tiempo de los tallos
que, seguros del suelo, buscan viento.

Hace días, lo anuncio sin pancartas,
acudo a los sepelios con manzanas
que devoro en andenes solitarios
y de las cuales, lúcido y violento,
conservo las semillas
que luego siembro a espacios razonables
cosa que, cuando el himno de la nube
las convierta en la sombra de noviembre,
crezcan, sanas y dulces, las distancias.

***

You say you’re lonely

Fracasas cuando intentas
mirarme con espadas desde el vidrio
de tus ojos ungidos con cerveza.
Tu mirada es un ancla, no un torpedo,
y en ella se detienen a beber los soldados
cada vez que la lluvia les arruina el recuerdo.

Fracasas cuando quieres,
con tus manos de huérfana,
arrancarme a pedazos los sueños de la boca.
Tus dedos son el viento que corrige la albahaca
y sutura las dudas que nos impone el vértigo.

Fracasas cuando pides,
con esa voz de madre de los lirios,
que llore y que me hunda.
Tu voz no mata nada.
Tu voz es el aliento que salvará la Antártida.

***

El lujo fue un albur

¿Qué pasa en esta foto de mi infancia?
¿Por qué si, en su furiosa disciplina,
la guerra masticaba cada esquina
no aparece el dolor ni la distancia?

Lo que flota es un barrio en su fragancia
de canonización y naftalina
y un déjà vu de pueblo con su andina
costumbre de ignorar a la ambulancia.

Uno encuentra la aguja entre las pajas
cuando el alma decide por el cuello
y descubre, entre púas y mortajas,
las alhajas o, al menos, su destello.
Nadie limpia el recuerdo con navajas.
Nadie quiere, jamás, soltar lo bello.

***

Creerse vivo

¿Qué quieres que te diga, papá, sino este charco?

¿Que me he reconciliado con el dios de los mártires
y que he dado por buena su lámpara de culpa
y que he puesto la carne vulgar de mi mejilla
para que su indolencia vulgar la use de alfombra?

¿Quieres acaso, padre,
que te hable de la patria con violetas?
La patria es cosa mala, papá. Mala y absurda.
Solo se dice patria si se dice frontera
y sabemos de sobra cuánto polvo hay en eso.

Soy un hombre con manos
y las manos se usan —me enseñaste con besos—
para abrazar el lápiz
y dibujar la hache adelante del hombre.

—————————————

Autor: Carlos Palacio (Pala). Título: En el abrazo de la sílaba. Editorial: Hiperión. Venta: Todos tus libros, Fnac y Casa del Libro.

3.7/5 (50 Puntuaciones. Valora este artículo, por favor)
Notificar por email
Notificar de
guest

0 Comentarios
Feedbacks en línea
Ver todos los comentarios