El escritor se prueba en la segunda novela

Una mujer desaparecida hace veintisiete años es ejecutada delante de una comisaría. El grupo de Homicidios de la UDEV, con la inspectora Tania Bilbao a la cabeza y el policía Arturo Yani como ayudante, tratará de descubrir dónde estuvo todo ese tiempo y por qué ha sido asesinado ahora.

En este making of Toni Sánchez Bernal explica cómo escribió Atrapada en la oscuridad (Planeta).

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Esta mañana estoy sentado en la terraza del piso de mis suegros en la playa. A lo lejos se aprecia a la gente reír y saltar las olas, pero yo tengo la mirada perdida en el portátil, en un archivo de Word con algunas anotaciones sueltas, puestas al tuntún.

N. sale a la terraza, pone su mano en mi hombro y me mira con cierta preocupación. No necesita hablar, ya sé lo que está pensando.

Ella sabe, porque ha sufrido mis angustias y desvelos, el esfuerzo por compatibilizar varios trabajos alimenticios, la aventura que supone criar a un niño que aún no tiene un añito… y encima, mi gran incapacidad: no sé desconectar. Aquí estoy, dedicando mi poco tiempo libre a meditar frente al ordenador.

«Deberías darte un respiro. Vienen por delante meses de reescritura con Ofensa al frío, no pasa nada por dejar el portátil aparcado un poquito», me dice N.

Pero soy un culo inquieto y tengo muy presente algo que una vez le escuché a Isabel Allende en una conferencia. Contó que cuando Carmen Balcells, la reputada agente literaria, la llamó para decirle que había leído el manuscrito de La casa de los espíritus, que le había gustado y la iba a representar, le dijo: «Pero ojo, no te confíes, conseguir una primera novela es fácil, en realidad el escritor se prueba en la segunda novela».

No me estoy comparando con Isabel Allende, ni mucho menos, pero su consejo a los nuevos autores se me quedó grabado: el escritor se prueba en la segunda novela.

Ya en ese verano de 2022 intuía que aquello era cierto, que había una presión real a la hora de ponerse a escribir después de publicar una ópera prima. Por eso deseaba trabajar cuando antes en el manuscrito que más tarde se convertiría en Atrapada en la oscuridad, para no perder el hábito, no dejar que la ansiedad llamara a la puerta o los miedos hicieran acto de presencia.

Aunque una cosa es QUERER, y otra cosa es PODER.

Sí, contaba con pequeñas anotaciones: un personaje que llevaba tiempo hirviendo en mi mente (un policía novato que ha de investigar a escondidas a sus nuevos compañeros), un atisbo de trama (la aparición de una mujer que estaba en paradero desconocido desde hacía décadas), cierta fascinación desde niño por lo que se esconde bajo el suelo de toda gran ciudad, un conjunto de temas que deseaba desarrollar (la virtud de ser buena persona pese a todo y contra todo, o el sentido del deber y el honor), alguna que otra escena suelta… pero no veía claro qué tenía realmente entre manos.

Al hablar del proceso creativo de Atrapada en la oscuridad no puedo hablar de un momento en el cual me quedara quieto, visualizando todo un esquema en mi cabeza y pensando: «Oh, tengo una historia».

No, todo consistió en sentarme delante del portátil e ir ordenando las diferentes piezas que tenía dispersas por mi cabeza. Y tener bien presente que escribir es reescribir. Una labor que se alargó tres años y que hoy se resume en casi 500 páginas.

¿El principal cambio de la escritura de mi primera novela respecto a la segunda?

Cuando trabajaba en Ofensa al frío pensaba que lo más seguro es que solo me leyera N. Tal y como había ocurrido con algún que otro manuscrito fallido y más de un guion. Así que N. era la lectora que tenía en mente en todo momento. Pensaba qué le haría sonreír, qué indirectas captaría, dónde la emocionaría…

Sin embargo, cuando afronté la escritura de Atrapada en la oscuridad agrandé inconscientemente mi público a tres plazas: N. (mi lectora de guardia), J. (mi agente) y Z. (mi editora). En el verano de 2022 aún no había tenido contacto con los posibles lectores que yo pudiera tener, por lo que nunca pude pensar en aquel chico que me comentó que le gustaban los capítulos cortos o aquella señora que me aplaudió algún posible manierismo en mi estilo.

Nada. En aquel instante, estando delante del ordenador, solo escribía teniendo en mente a mi lectora de guardia, mi agente y mi editora. Ya está. Pensaba en que ese diálogo le gustaría a Z. o ese giro sorprendería a J. Es decir, lo que sí sentí en esta ocasión fue cierta profesionalización, sentirme respaldado; o empujado, mejor dicho, pues saber que contaba con el apoyo y la futura lectura de estas tres mujeres me obligaba a seguir hacia delante, a hacerlo lo mejor posible.

Con todo, esto puede llevar a error. Lo más bonito de escribir Atrapada en la oscuridad fue la libertad que me permití. El libro que ha aterrizado en las librerías es la historia que he querido narrar, y tal y como la he querido contar.

Me siento seguro ante la presión de «El escritor se prueba en la segunda novela», yo lo he hecho lo mejor que he podido y he sabido, a partir de aquí… los lectores decidirán si merezco tener una carrera en esto de la literatura o no.

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Autor: Toni Sánchez Bernal. Título: Atrapada en la oscuridad. Editorial: Planeta. Venta: Todostuslibros.