El amor es uno de los temas principales de la obra en verso de Ismael López Gálvez. A continuación compartimos cinco poemas del autor jienense, cuatro de los cuales fueron publicados en la revista Palabra que dormía, y el llamado «Te escucho» pertenece a su obra La piedad del leviatán (Olé Libros, 2023).
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YO SÉ QUE DIOS EXISTE
Yo sé que Dios existe todavía,
que no existir no puede, que no ha muerto
ni nadie lo mató, que no es posible
la dicha mía, dicha santa, dicha
de habernos encontrado sin buscarnos,
de ser llamado a ser para servirte.
Yo sé que Dios existe todavía,
porque escuché mi nombre de tu boca
y me hice carne, carne como el Hijo.
Y así mudé la fe por la certeza:
yo sé que Dios existe porque existes.
*
NADA MÁS
Nada me pidas, darte nada puedo.
No es posible saldar mi grave deuda.
No dejes que mendigue lo que tienes.
No me reclames más, que nada tengo.
No quieras que te diga lo que callo.
No calles lo que quieras que te diga.
No pongas en mi boca, vida mía,
besos que nunca pido. Ya no ansío
más deber que la vida que te debo.
*
TE ESCUCHO
En este mar helado yazgo solo,
mi velero ya herido gime bajo.
Me abandonan la fuerza y la esperanza.
He perdido la estela del gran pez.
Sin marineros sufro de locura.
Escucho tus palabras y tu duelo.
Me llamas al refugio de tus ansias.
Tu voz es la razón por la que vivo.
*
HISTORIA DE UN BESO
A José Luis Garci,
por la película que hizo nacer este poema.
Sólo supe del mundo cuando el beso
que te ofrecí primero se hizo carne,
temblor de hoja caída y charco nuevo.
Sólo entendí el sentido de la vida
cuando huyó con los trenes que no vuelven
pero dejan las huellas de su paso.
El sabor se guardó perenne en todos
los que tras él vinieron: un fantasma
que habita las estancias de aquel día
y que regresará para llevarse
los besos que se han dado en las películas.
Te he querido tantísimo que temo
que más amor no quede para nadie.
*
SIN NOMBRE
Puedo ser —te lo prometo—
todo aquello que imagines:
el más noble de los troyanos
o un simple cobarde entre los hijos de Príamo.
Puedo ser tu padre,
tu madre
o tu hermano,
como lo fue Héctor para Andrómaca,
o la necesidad que se te caiga de la boca
o la opulencia que se te acoja a la mirada.
Por poder podría amarte
de manera sencilla
y dejar que arda Ilión junto a su estirpe,
doblegar a tus pies venerables el bronce
y el alto penacho de crines de caballo,
renegar de la gloria
y quedarme tras los muros,
lejos de la batalla,
sólo para que no te trague la tierra.
Desea, amor mío, y seré tu deseo,
aunque nunca nadie hable de mi linaje,
aunque se pierda por siempre mi nombre
con la última vez que me nombres.
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Da gusto encontrar en los días que corren poemas con gusto clásico, con métrica, recursos y profundad para hablar de amor.
Así es, poesía de agua y de alma
Sensacionales todos, pero me quedo con “Dios existe” y su último verso. Quiero más.
Claro que Dios existe, en toda la vida y la poesía.
Gracias. Sobre todo por el primero. Dios existe
Endecasílabos muy bien construidos con intertextos adecuados. Borges comentó que el poema debe provocar la sensación de que algo preexite; estos versos lo consiguen
El poeta no es constructor, ni endecasilabo, ni ínter texto, pero si preexistentes, no es necesario maullar para ser lobo
Una vez más Ismael López saca a pasear su poesía. Son de esos poetas humildes que te conmueven con sus versos desde lo más hondo de su saber hacer. Me recuerda a LAC en su poesía de amor y no exagero, comparen y lo verán. La poesía española necesita poetas tan grandes y jóvenes como Ismael López.
Realmente destacable cada poema. Muy bien elaborados con frases impecables. Felicitaciones al autor
Glorioso poema, amoroso poema
Gracias a todos por sus gentiles, generosas e inmerecidas palabras. Me ha emocionado mucho la acogida que le han dado a los poemas. Bendiciones.
“Yo sé que Dios existe”
“Desea , amor mío ,y seré tu
deseo”
López Gálvez
“Claro que Dios Existe: en TODA la Vida y la Poesía”.
Danpier
Sabernos seres deseantes,
insaciables, no acomodados.
Desear el Amor en forma de cuerpo humano, Elegido UNO para siempre.
Recorrer cada célula del otro.
Usar las manos para tocar los límites y la mirada para alcanzar lo profundo.
Poder poner en PALABRAS el Amor Espiritual – Tierno y sensual
ratifica que EL VERBO SIEMPRE ALCANZA.
Me encanta que “Palabra que dormía” sea el título para una revista; siendo UNO de los Medios encargados de mantenerlas despiertas.
En la Poesía está Dios y
hay Misterio (Fusión de dos Comentarios, el otro, pertenece a María Dolores y está en otro posteo de Zenda). Exacto!
La Poesía nos saca de sí al provocarnos sensaciones.
La Poesía nos saca de sí cuando nos altera la mirada respecto del mundo.
La Poesía Salva como dicen los Parkour Poético.
Conceptualización Certera y perfectamente entera; sin fisuras.
Ése Dios me dice que tú eres Poesía, desde la cumbre granítica, desde el abismal océano, desde el recóndito paraje, desde la fulgurante estrella, sí, Poesía eres tú, y yo, de tí, belleza, dichoso enamorado.
Excelente. Gracias por compartir estos poemas. Saludos desde Barranquilla, Colombia.