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Aún es de noche en Caracas lleva a Venecia la novela de Karina Sainz Borgo La hija de la española

Aún es de noche en Caracas lleva a Venecia la novela de Karina Sainz Borgo La hija de la española

Podía pensarse que Aún es de noche en Caracas, película de las directoras Mariana Rondón y Marité Ugás, ha suplantado el argumento de la novela de Karina Sainz Borgo La hija de la española (Lumen). Pero la coproducción entre México y Venezuela que se exhibe en el 82º festival de Venecia no es precisamente una usurpadora, como ciertamente es la protagonista de la historia. Esta ficción política es la adaptación de la premiada novela de 2019, la primera de su autora, titulada así en lengua inglesa, y por tanto aborda la violenta problemática de Venezuela a través de la historia de una maestra que, esta sí, asume otra identidad para huir del país.

"La destrucción de Venezuela, la constante amenaza de la muerte, provoca la renuncia a los orígenes y el desarraigo de la protagonista en una Caracas nocturna y violenta"

La colombiana Natalia Reyes es su protagonista, aunque en el reparto hay otros nombres con potencia internacional, como el de Edgar Ramírez. Puede que el fracaso de taquilla de Terminator: Destino Oscuro supusiese una rémora en el ascensor a la fama internacional de Reyes, pero no parece que vaya a cambiar, precisamente, esa condición de estrella. Al fin y al cabo, La hija de la española es también una huida, una carrera hacia adelante, la de la protagonista Adelaida Falcones, como la de la superproducción de James Cameron, y la pátina de thriller en lengua española goza de un alcance comercial notable que la presencia de Reyes amplifica.

La hija de la española, o It Would Be Night in Caracas, introduce al espectador en el cine político puro a través de un movido relato en clave de thriller paranoico y drama identitario. La destrucción de Venezuela, la constante amenaza de la muerte, provoca la renuncia a los orígenes y el desarraigo de la protagonista en una Caracas nocturna y violenta. La búsqueda de la dignidad de Adelaida Falcones —o Adelaida Falcón en el film— es la historia de una de las “diásporas más grandes de América”, según las directoras. “Más de ocho millones de personas desplazadas, despojadas de una patria, de una pertenencia, de un nombre”, aseguran en las notas de la Mostra.

"Las directoras han comprimido el relato literario en un film de poco más de 90 minutos, una magra duración que garantizará la urgencia y tensión de un film verdaderamente oscuro"

Karina Sainz Borgo protagonizó con La hija de la española uno de los desembarcos literarios más celebrados de los últimos tiempos. El relato de las penurias políticas y económicas de un país latino no les puede ser ajenos a la también venezolana Mariana Rondón y la peruana Marité Ugas, que habitúan a alternar la dirección de sus proyectos pero en el caso de Aún es de noche en Caracas han convenido repartirse la tarea de mostrar la situación de un país empeñado en convertir en realidad el concepto de distopía. Las autoras de Zafari, Pelo malo o Postales de Leningrado consideran la historia pergeñada por Sainz Borgo como una que “resuena personalmente”, la de “el desplazamiento interno, la pérdida de identidad y la brutalidad de intentar sobrevivir en un país que ya no la reconoce como parte de él”.

Las directoras han comprimido el relato literario en un film de poco más de 90 minutos, una magra duración que garantizará la urgencia y tensión de un film verdaderamente oscuro que, evidentemente, servirá de altavoz y recordatorio de la tensa situación en Venezuela. Después de Venecia le toca también desembarcar en otro escaparate internacional fundamental, el TIFF de Toronto, porque la conversión fílmica de Adelaida en “la hija de la española” tiene intención de resonar tanto como el libro original.

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Mario Raimundo Caimacán
Mario Raimundo Caimacán
2 meses hace

La desdicha Venezuela cayó en el abismo porque, me contó un amigo historiador, tenía unos gobernantes tan corruptos y cínicos y unos intelectuales tan despistados, que todos inmersos en la búsqueda del ascenso social y económico del pequeño-burgués, vivían imitando el capitalismo salvaje y adorando el falso discurso revolucionario del Rey Comunista Fidel Castro, admirado unánimemente por todos. Y al final, Venezuela se estrelló contra la realidad del fracaso, la hambruna, la represión y la destrucción material y moral del “paraíso comunista” y hoy, surrealista colonia cubana, agoniza. Ésto opina mi amigo venezolano e historiador, y me leyó un manifiesto de apoyo a Fidel Castro que firmaron “todos los intelectuales” venezolanos pocos años antes de votar por un candidato golpista fracasado que decidió imitar la fracasada “Revolución Totalitaria”. Así que toda ésta desgracia de Venezuela, que nutre a los actuales escritores, cineastas y demás artistas e intelectuales venezolanos, es fruto envenenado de la labor proselitista, ideológica, política, de la anterior generación de intelectuales venezolanos. Tanta estupidez de “los culpables” solo puede explicarse por la ignorancia de la Historia o la ceguera ante la realidad. En ambos casos eran enajenados. Los cubanos continúan esclavizados y los venezolanos decidieron imitarlos. Otro ejemplo de los desvaríos políticos de la América Latina porque en Nicaragua ya Ortega y su mujer se proclamaron Reyes. En Brasil anularon el juicio de Lula por ladrón del Tesoro Público, decidieron que las pruebas ya no existían aunque Lula seguía dueño del apartamento de lujo que recibió como soborno, y lo sacaron de la cárcel para hacerlo otra vez Presidente y en México continúa gobernando un partido amigo de abrazar a los delincuentes (“Abrazos, no balazos”) que reclama ante Estados Unidos en defensa de un millonario jefe del narcotráfico y jamás protesta ante ese país por el trato inhumano que agravia a los humildes migrantes mexicanos… !Cosas veredes Sancho!

Mario Raimundo Caimacán
Mario Raimundo Caimacán
2 meses hace

He leído unas cuantas críticas o reseñas de cine de la película basada en la exitosa novela de la hispano-venezolana Karina Sainz Borgo (tiene doble nacionalidad) , su premiada “La hija de la española”, la mayoría alabando la novela y su adaptación al cine, y pocas quejándose del “alto contenido político” de la película ?No entienden que la novela está inspirada en la tragedia de la destrucción de Venezuela por unos ladrones disfrazados de “revolucionarios”, un hecho político? Allá llegaron a la desfachatez de agregar una estatua del ladrón que se apoderó del país en cada plaza del héroe nacional y el pueblo ya las llama, al estilo borgeano, las Plazas “del héroe y del traidor”, porque el fulano, ya muerto porque Zeus le mandó un rayo para que se acabara la rabia (que aún persiste, como en Cuba), decidió imitar al Rey Fidel y gobernar como Tirano Eterno, y no encontró mejor camino que regalarle Venezuela a la Tiranía Comunista de Cuba, por eso lo llaman Traidor y los niños y jóvenes pueden aprender de los errores de sus mayores, quienes ciegos o ‘pendejos” (como llaman a los gilipollas) votaron en elecciones libres y verdaderas, por el golpista fracasado engendro de la diablocracia de los cuarteles y los ignorantes. Ahora en las plazas mayores de cada ciudad, villa y pueblo, todos pueden ver los contrastes entre el héroe de la Independencia y el traidor de la esclavitud: el primero rico que salió casi pobre del gobierno, el segundo un pobre que se convirtió en multimillonario al estilo jeque árabe por robar a saco el tesoro público; el primero valiente y batallador, el segundo cobarde que siempre se escondió y se rendía al escuchar cerca los tiros; el primero capaz de suicidarse antes que caer prisionero, el segundo, vergonzoso llorón pidiendo clemencia bajo la protección de las sotanas; el primero un hombre cultísimo, hijo de la Ilustración, el segundo un delirante ignorante imitador del hablachento Fidel Castro, incapaces de un buen discurso porque creyeron que se trataba de un concurso maratónico de palabrería hueca, y la realidad es que la incapacidad de expresarse en forma clara y breve exponía sus carencias cognitivas. En cualquier país civilizado los ciudadanos miran en forma despectiva a los tiranuelos parleros con sus peroratas extenuantes y a sus víctimas que deben sufrirlos y soportar sus desvaríos discursivos.
Felicito a la brillante escritora hispanoamericana y española Karina Sainz Borgo por escribir con valentía y lucidez “La hija de la española” exponiendo y desnudando la terrible desgracia que sufre Venezuela bajo el poder de los falsos revolucionarios cubanos y venezolanos, y también felicito a las valientes cineastas hispanoamericanas que se atrevieron a llevar a la gran pantalla la adaptación de la novela. Espero que todos lean la novela y vean la película.