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La alienación de la era digital

La alienación de la era digital

Desde la irrupción de los dispositivos móviles en las sociedades contemporáneas, la autenticidad de nuestras relaciones personales, la capacidad de aprendizaje y la forma en cómo discutimos los problemas sociales han cambiado definitivamente. Es lo que el politólogo y catedrático de la Universidad Iberoamericana Mario Campos ha observado tras analizar las consecuencias que tiene la fragmentación de nuestra atención que provocan esos dispositivos. En su libro Batalla por la atención, (Penguin Random House), el autor se pregunta cuáles han sido los efectos que tiene en lo personal, laboral y académico ese sutil pero enorme cambio que estamos viviendo al haber permitido, prácticamente sin darnos cuenta, que todos esos dispositivos y aplicaciones que se cuelan en nuestras vidas a través de internet, estén cubriendo un montón de necesidades que antes resolvíamos de otras formas. Por ejemplo, Campos aprecia un importante costo personal que se refleja en varias dimensiones, la primera de ellas y en ningún caso baladí, en nuestras relaciones personales, en la cuales, dice, hemos perdido profundidad, ya que mientras miramos una pantalla el mundo resuena a nuestro alrededor como en sordina. Otra consecuencia de esa falta de atención se traduce en acciones que nos cuesta más trabajo realizar, como hacer una larga lectura, ejercicio que se complica cuando el móvil y las notificaciones no paran de llamar nuestra atención. Campos sostiene que «estar siempre frente a las pantallas significa que vivimos en un estado permanente del presente», donde solo existe eso que estamos viendo, y cuya consecuencia inmediata es que «vivimos en una sucesión de escándalos de la vida pública que en 48 horas no vamos a recordar porque tendremos otro tema de discusión en ese momento», al tiempo que dicha incapacidad de fijar la mirada en un solo tema por un periodo de tiempo largo impide que lo desarrollemos en profundidad, sin llegar a entender sus consecuencias. En ese sentido, Campos señala que hay otro fenómeno que está sucediendo y que explicaría muchos de los giros políticos que han tenido lugar en los años recientes, pues en su lucha por llamar nuestra atención, las plataformas nos presentan un tipo de información que no es necesariamente la que necesitamos saber para entender mejor un tema en cuestión, sino que será la que mejor nos retenga, por lo que Batalla por la atención plantea una pregunta crucial: ¿quién decide hoy qué información entra por nuestros ojos y oídos? «Pese a lo que pueda pensar cualquiera», responde el propio Campos, «todo indica que son los algoritmos». Ellos, en última instancia, son quienes se la disputan porque se convierte en dinero, en publicidad personalizada, monetizando cada segundo que pasamos frente a una pantalla a partir de dos insumos: nuestros datos y nuestra atención, teniendo en cuenta que la atención es muy valiosa y limitada y, por lo tanto, su valor es enorme. Por otra parte, Campos ha tenido cuenta que al revelar nuestra información personal, nuestros gustos y preferencias, desvelamos si somos más liberales o conservadores, y cuando les decimos a las plataformas qué tipo de contenidos nos gustan, invisibilizan toda la información que pueda contradecir nuestra visión, porque si nos dan un contenido con el que no estamos de acuerdo, es muy probable que pierdan nuestra atención, lo que acaba por crear burbujas informativas que nos rodean de voces que confirman o respaldan lo que ya creemos. «Esto provoca que nos radicalicemos, porque cuando solo vemos aquello con lo que estamos de acuerdo, se vuelve muy difícil hablar con alguien que piensa diferente». Y el puñetero algoritmo no hará otra cosa que hincharnos a información que endurezca nuestra postura, debilitando hasta casi hacerlo desaparecer cualquier tipo de diálogo social. Para rematar la faena, Campos advierte que ya está sobre nuestras cabezas la dichosa Inteligencia Artificial, que permite a las plataformas que analicen cosas antes impensables como si nuestras pupilas se dilatan o no cuando vemos un vídeo, y cuyos resultados provocarán que los contenidos sean más adictivos. Así que el gran reto, como sostiene Mario Campos en este interesantísimo libro, es cómo afrontaremos el hecho de estar expuestos no solo a contenidos que reafirmen nuestra forma de pensar, sino también a aquellos que reafirmen las mentiras y sesgos que creemos verdaderos. ¿Le suena de algo todo esto, caro lector?

BIBLIOTECA DE CHAPULÍN, CLÁSICOS DE LITERATURA INFANTIL

"El objetivo de la colección es fomentar la lectura desde la la niñez y utilizar la literatura como medio para acceder a la cultura, algo que urge en México"

Hay que felicitar a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) por haber recuperado en preciosas versiones facsimilares una de las colecciones más sobresalientes en la historia de la literatura infantil y juvenil mexicana: la Biblioteca de Chapulín, cuyos libros fueron editados durante los años 40 del siglo pasado por la Secretaría de Educación Pública y que sigue representando uno de los más brillantes testimonios de las innovaciones en escritura, ilustración y edición de libros infantiles mexicanos. El acierto hay que apuntárselo también a la escritora Socorro Venegas, directora de Publicaciones y Fomento Editorial de la UNAM, quien acaba de presentar, durante la décimo sexta edición de la Fiesta del Libro y la Rosa, las tres nuevas ediciones de este preciosa colección: Un gorrión en la guerra de las fieras, de Antoniorrobles, con ilustraciones de Gabriel Fernández Ledesma; El zar Saltán, de Alejandro Puchkin e ilustraciones de Angelina Beloff, y El mal de ojo, de Nathaniel Hawthorne, con grabados de José Chávez Morado. El objetivo de la colección, ha dicho Venegas, es fomentar la lectura desde la la niñez y utilizar la literatura como medio para acceder a la cultura, algo que urge en México. Hasta 2023, cuando fue reconocida por el Banco del Libro de Venezuela con una mención en la categoría infantil por su Rescate de Colección Editorial, la revitalizada Biblioteca de Chapulín reunía seis títulos: Canción para dormir a Pastillita, El caballito jorobado, El niño de mazapán y la mariposa de cristal, La Cucarachita Mondinga y el Ratón Pérez, La máscara que hablaba y Los hermanos de Ranita, títulos que recordamos con cariño todos aquellos que de niños aprendimos a amar la lectura.

MARISOL SCHULZ, PREMIO SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ

"Schulz ha sido distinguida con el máximo reconocimiento que otorga la Universidad del Claustro de Sor Juana de la Ciudad de México"

Durante poco más de una década, Marisol Schulz ha llevado con gran éxito las riendas de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), “ese enorme sueño donde el pensamiento, la cultura y la literatura de todas las naciones convergen, se reconocen y dialogan en un solo lenguaje», y «uno de los espacios de defensa de la libertad de pensamiento y de expresión, de respeto de las conciencias”, como ha dicho ella misma. Por esa razón y por su pasión por los libros y la literatura, Schulz ha sido distinguida con la Presea Sor Juana Inés de la Cruz, el máximo reconocimiento que otorga la Universidad del Claustro de Sor Juana de la Ciudad de México a quienes contribuyen de forma destacada al desarrollo cultural, social y humanista de nuestras sociedades, y que anteriormente han recibido personalidades de la talla de Carlos Monsiváis, Elena Poniatowska, Margo Glantz, Leonora Carrington o las Abuelas de la Plaza de Mayo. Todos los parabienes para Marisol, una de las grandes promotoras culturales que tiene México.

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