De vez en cuando, la fortuna pone en mis manos un libro que supera con creces mis expectativas y cuya lectura me absorbe hasta el punto de leer las últimas doscientas páginas de una sentada. Ayer, volví a vivirlo con la última publicación del exitoso autor de novela histórica, ganador de dos premios Hislibris, Alberto Caliani (Ceuta, 1965), titulada El cazador de libros. La intriga, la emoción y el suspense eran tales que no fui capaz de irme a la cama sin conocer el desenlace, y continué leyendo hasta terminar la última página y asimilar el trepidante final que había preparado el autor.
En esta ficción, mezcla de novela negra, aventuras, intriga y suspense, Caliani vuelve a hacer gala, como si se tratara de una novela histórica, de una profusa labor de documentación. Aborda numerosos temas actuales que dotan de verosimilitud a la historia: desde cómo se organizan estructuras supranacionales hasta labores de investigación policial y agencias de inteligencia; desde complejas organizaciones políticas hasta los sistemas del actual “Gran Hermano” que todo lo sabe; de redes de espionaje a métodos de entrenamiento en combate. Son temas complejos cuya precisión exige un trabajo de investigación ingente que merece ser reconocido.
La historia comienza con una estudiante de doctorado que se encuentra documentándose, para su tesis, en la Biblioteca Nacional de Madrid. Sin embargo, no es quien aparenta ser: su misión es infiltrarse en la estancia más secreta del edificio, una habitación llamada “La Cámara Carmesí”, donde se guardan libros prohibidos retirados de circulación desde los tiempos del emperador Carlos V. Lo que nadie imagina es que la organización secreta que creó el emperador para proteger al mundo de esos libros aún sigue funcionando con la misma eficacia, objetivos y determinación que hace cinco siglos.
La estudiante logra su propósito de acceder a la cámara y hacerse con el documento para el que fue contratada. Este robo desencadena una encarnizada persecución por parte de diversos agentes que buscan recuperarlo o apropiarse de él. Aquí comienza una trama enrevesada y atractiva, en la que, a partir de las pistas contenidas en el manuscrito, los personajes intentan encontrar un objeto deseado que ha permanecido oculto durante siglos, lejos de las codiciosas manos de quienes ansían el poder que este confiere. Tras numerosas vicisitudes protagonizadas por distintos personajes, dotados todos ellos de profundidad psicológica y una particular humanidad, se produce un desenlace pausado pero intenso, en el que Caliani logra mantener al lector en vilo. Con una imaginación desbordante, y al mismo tiempo creíble, el autor pone punto final a la historia con un cierre impactante por su inesperado desarrollo.
A pesar de tratarse de una obra de intriga y suspense, llena de acción y aventuras, Caliani logra dotar a sus protagonistas de historias personales marcadas, en ciertos casos, por la obediencia ciega, pero que no se hallan exentos de humanidad y deseo de redención, lo que aporta profundidad emocional a la trama. No todo es correr de escena en escena: también hay gestos humanos en los protagonistas.
En el panorama editorial español, la novela negra goza de excelentes autores: Gómez-Jurado, Mola, Urturi, Silva, Pérez-Reverte, Montalbán, Redondo, entre otros. A este elenco considero que puede empezarse a incluir a Alberto Caliani, ya que, como adelanté en el título de esta reseña, El cazador de libros presenta un estilo directo, elegante y sofisticado, similar al de las novelas de Ian Fleming. También se perciben personajes con una notable capacidad de razonamiento y deducción, dignos de Conan Doyle o Agatha Christie. Esta obra me ha recordado a otro referente más próximo: El último Catón, de Matilde Asensi, aunque en el caso de Caliani el ritmo y el entretenimiento alcanzan un nivel aún más trepidante.
Por todo lo expuesto, considero que debo recomendar este libro, como también hice con las obras anteriores de Alberto Caliani. Quien ya haya leído alguna de sus publicaciones previas sabe perfectamente lo que puede esperar; y quien aún no lo haya hecho, seguramente se sorprenderá muy gratamente. El cazador de libros parece un libro escrito, precisamente, para acompañarnos en los periodos estivales en los que disponemos de tiempo para disfrutar de la lectura.
____________________
Autor: Alberto Caliani. Título: El cazador de libros. Editorial: Ediciones B. Venta: Todostuslibros


Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: