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Ritual de la inocencia y los hondos fulgores del mundo

Ritual de la inocencia y los hondos fulgores del mundo

La línea poética que responde a una visión del mundo leído como sagrado continúa dando señales inequívocas de vigencia en estas primeras décadas del siglo XXI. Uno de los cultivadores actuales más representativos de ese enfoque y práctica literaria es sin duda José Luis Puerto (La Alberca, 1953). Este escritor salmantino fue galardonado con el premio Castilla y León de las Letras en su edición de 2018 en virtud del conjunto de su obra, diversificada en las modalidades de poesía, narrativa, ensayo, e investigación filológica y etnográfica, centrada esta mayormente en estudios sobre tradiciones campesinas. Cuenta también Puerto con premios específicos de poesía como, entre otros, el Ciudad de Segovia y el Gil de Biedma, y este año 2023 ha dado a conocer su libro de poemas Ritual de la inocencia, editado en Madrid por Reino de Cordelia.

En la primera de las seis citaciones que anteceden a su libro se encuentra la expresión concreta, “ritual de la inocencia”, debida a W. B. Yeats, que ha inspirado la titulación de esta amplia muestra de su quehacer creativo, asumida desde una concepción del poeta como ser inocente, en un enfoque que Claudio Rodríguez y José Ángel Valente ya suscitaron. María Zambrano implementó esa idea generalizándola a mayores, al apuntar que “solo el hombre dotado de un corazón inocente podría habitar el universo…”, como se recuerda en el prefacio de Ritual de la inocencia.

Repartidos en el libro los ciento cuarenta y cinco textos (en su mayoría con versos cortos) en tres secciones sin título, y meramente numeradas, remarcaré primeramente que la lectura sacra del mundo que sustenta, manifiesta y propone José Luis Puerto en su universo lírico no se atiene, por supuesto, a perspectivas religiosas consuetudinarias y confesionales, aun cuando no faltan tampoco algunas notorias alusiones de índole cristiana. Su lectura de la realidad, y primordialmente de la poesía, como sagrada, supone una creencia y una búsqueda de lo mistérico en las distintas vertientes de la vida y en todos sus diversificados ámbitos, pero sin secundar credos más o menos rutinarios que se han institucionalizado. La dialéctica que acaso pueda darse entre hombre y divinidad la plantea y considera el hablante del poema “(en las manos)” diciendo que estaríamos

En las manos de Dios

Pese a que no sepamos

Ni dónde está ni quién

Pueda ser siquiera

Ni si acaso si existe.

Porque pudiera ser

Que llamáramos Dios

A la mera intemperie en la que estamos. (34)

La apelación al misterio es uno de los motivos inspiradores más reiterados en Ritual de la inocencia, de suerte que todos los lugares textuales ad hoc conforman una poética del misterio entrevista y formulada desde ángulos disímiles, pero concordes, y que voy a resumir: El hombre pertenece al misterio, pues forma parte de él. Misterio es la luz, misterio es recorrer las sendas del vivir, misterio es la fluencia hacia la muerte, que supone el misterio por antonomasia, incluyendo el del final de la propia tierra, como leemos en el poema “(Jálama)”. Misterio es asimismo la poesía, cuya más genuina función pudiera ser ir añadiendo más misterio a cuanto es de por sí misterioso.

El secular asunto definido como “el puesto del hombre en el cosmos”, en un cosmos conceptualmente remozado que habría de incluir las constantes galaxias que van generándose agrandándolo sin fin, se aborda aquí y allá en Ritual de la inocencia. Se dirime desde un punto de vista que resalta una y otra vez la intemperie, y la soledad humanas, pero poniendo énfasis en que el hombre camina solo sin que deje de ir acompañado por todos los seres que están inmersos en un grandioso escenario cósmico transido de musicalidad sacra en la que la luz ya es canto. Y en este punto parecerá ocioso añadir que las resonancias de fray Luis de León son frecuentes cuando José Luis Puerto se asoma poéticamente a las profundas melodías interiores de lo que le rodea y de lo que le trasciende.

La encarecida ponderación de la antedicha compañía constituye uno de los meollos de la ética que se infunde en la palabra lírica de José Luis Puerto, una ética en la que la alteridad fraterna con todo lo existente resulta sine qua non en el sistema de valores de dignidad del que se nutre su obra. Otro valor sustantivo de esa ética de la dignidad, resuelta siempre en una axiología de la plástica y del corazón, se basa en el convencimiento, larvado desde el simbólico jardín de su infancia, de que crecer hacia dentro supone superar el darse uno mismo hasta culminarlo en ofrecerse, como advirtió en la entregada vida doméstica que ejemplificó su progenitora.

El poeta manifestaba esa creencia al término de uno de los poemas en prosa de su espléndido libro de 2021 La madre de los aires, donde se refiere “a la más duradera convicción que nunca me abandona: Sin darse todo entero, el vivir solo es muerte.” (29). En el poema “(eso me basta)”, de Ritual de la inocencia, expresa el dicente que le basta su propia pequeñez,

Si la comparto plena con los otros,

Con los demás, en el fulgor del mundo.

Eso me basta.

Eso me purifica,

Para poder hacerme ofrecimiento

Y cumplir mi destino. (196)  

Otro de los valores quiciales de esta ética reside en la exaltación de lo desvalido y desamparado, sobre todo en términos convergentes como los de la pobreza, de lo desprotegido, de lo precario, de lo menesteroso, de lo humilde, de lo pequeño, de lo sencillo, de lo efímero, de lo mínimo, de lo esencial, de lo desnudo. En muchas ocasiones sus versos nos remiten a una serena mirada de la vida en la estela de Francisco de Asís y también próxima a la de José Jiménez Lozano cuando no al primer León Felipe. En otras nos orientan hacia una actitud desde donde cantar dicha exaltación, o, si se quiere, pronunciarla para celebrarla, recordándonos entonces a poetas como, entre otros, Walt Whitman, así en el poema “(hoja de papel de seda)”, finalizado con una escalonada matización que contiene la dedicatoria de su palabra lírica a una

Pequeña

Delicada

Hoja (99) 

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Autor: José Luis Puerto. Título: Ritual de la inocencia. Editorial: Reino de Cordelia. Venta: Todostuslibros.

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