El poeta JCF Castrillo comunica, con elegante ironía, el pasado griego con el presente digital. Zenda comparte cinco de los poemas que integran su último libro, Vivir es anacrónico, publicado por la editorial El sastre de Apollinaire.
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ACRÓPOLIS
Vivir es anacrónico,
ni el tiempo traicionado
puede resucitar.
En la Acrópolis se hablan lenguas
bárbaras: hemos soportado
el fuego, la envidia, el odio,
la furia cristiana,
la musulmana también,
el hierro acelerado del cielo
y el expolio más cruel.
Ahora, en palabras que comprendo
y en otras que adivino,
grupos de invasores mudos
oyen las mismas patrañas
repetidas, repetidas y renegadas.
Sabedlo: Atenea volvió el rostro,
no soporta mirarnos a los ojos.
Vivir siempre ha sido anacrónico.
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ÁGORA
La perspectiva del tiempo es imperfecta,
para ser más preciso, carece de ella.
Su remedo son nubes que parecen viajar
y que desaparecen ante una atenta mirada.
Los colores fugitivos, irreales también,
creen que nos engañan con las estaciones,
porque el papel soporta las líneas de fuga,
son tránsitos que carecen de verosimilitud.
Tened en cuenta que, aunque la realidad
finja ser ingenua, se sirve de estrategias
infalibles, paseemos pues de nuevo,
como lo hacemos desde hace 2.500 años.
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PSYRI
Busco restos del pasado o del tiempo que vendrá,
revestido de lecturas e imágenes
de esta ciudad almacén de sombras,
con torcaces desplumadas
buscando reposo en Psyri,
pero no encuentro la dirección que esperaba.
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APUESTA
Todo lo que escribo en poemas es verdad,
aunque de ese tipo de certezas
que se resisten con rigor a aplicar
el método científico para su verificación.
Todo lo que sueño es mentira tras mentira,
pero de esa clase de historias que entusiasma
en circunloquios la memoria de los días
como las piezas de un puzle inacabado.
Todo y además nada, otro viaje,
verdad y mentira confundidas,
esa ruleta que gira una vez más
donde la apuesta es mi propia vida.
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ÁGORA IV
Qué sueños restañan la noche,
cuáles la emponzoñan.
Qué noche se decanta en luz,
cuál envenena las ventanas.
Qué luz cristaliza en palabras,
cuál atormenta los silencios.
Qué palabras recuerdan su origen,
cuáles abrasan con el viento.
Qué origen se prodiga en delta,
cuál maldice los frutales.
Qué delta abre las manos,
cuál anega la memoria.
Qué manos protegen los sueños,
cuáles los emponzoñan y envenenan
y atormentan y abrasan y maldicen
y los anegan hasta ahogarnos.
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Autor: JCF Castrillo. Título: Vivir es anacrónico. Editorial: El sastre de Apollinaire. Venta: Todos tus libros.
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¡Qué poesía! Me encanta el ritmo de los versos, la narración y la impasible manera de tratar los temas del tiempo, el paso del tiempo y de la vida misma. Enumera de forma vehemente lo que el tiempo ha marcado en la historia y nos hace gritar en medio de la era moderna, que en medio de tanta información parece ignorar las cosas más simples.